domingo, 24 de enero de 2010

La presi, el vice, el banco, los chinos y el circo

En el boxeo no solo son importantes los golpes, el juego de cintura y los pies son fundamentales. Hay que saber moverse y entonces sí intentar el golpe, pero sin descuidar la guardia. En la política la cosa es parecida, pero pareciera que el Gobierno no lo sabe. Va a la carga y comete errores que lo dejan desguarnecido ante una oposición siempre dispuesta a dar el zarpazo final.


La lección de la 125 parece no haber sido aprendida: el uso de la prepotencia, la confrontación permanente. Con la Ley de Medios Audiovisuales la cosa fue un poco distinta, un par de modificaciones desarticularon la tosca oposición que se valía de muy pocos argumentos. Pero otra vez el desatino a la hora de maniobrar da que hablar a muchos que viven de eso, de hablar de más. Echar al presidente del Banco Central por un mecanismo que no es el establecido, y con una cuestión como el manejo de fondos de por medio, es darle material incendiario a las corporaciones mediáticas y sus funcionarios políticos. Es ahí cuando la irresponsabilidad de unos y otros empieza a manifestarse en dimes y diretes fundados en la mismísima nada y aparecen, por ejemplo, los mensajes de texto y los e mails vaticinando un nuevo corralito o el Apocalipsis mismo cual película en 3D.
Al hablar de política en un país como Argentina hay que tener en cuenta en donde estamos parados. Prestando atención cuando voy por la calle escucho todo el tiempo comentarios del tipo “los Kirchner se están robando todo”, o que no les alcanzó lo de las jubilaciones entonces ahora quieren la plata del Central. Entonces no dejo de preguntarme ¿en qué país viven? ¿se fueron de viaje al huevo de Mork en el 84 y volvieron hace un año? ¿Menen, Cavallo, De LaRua no les suenan? ¡Hablamos de políticos argentinos! Y más allá de lo que se pueda pensar de la clase política tratemos de partir de la base de que todos son inocentes hasta que se demuestre lo contrario. Si no es muy fácil para los denunciantes profesionales como Elisa Carrió vivir acusando y hacer de eso una carrera política que carece de cualquier atisbo de responsabilidad social. No puede ser gratis que alguien diga que la gente se estaba armando para una escalada de violencia para el mes de diciembre del año pasado. Que acuse al Gobierno de generar caos y miedo para entonces ella ser la pacificadora. Y los medios como Clarín son los que le dan espacio a seres como Carrió o al mismísimo vicepresidente opositor Julio Cobos.
El no viaje a China de la Presidenta fue otro tema para que los habladores se dieran el gusto. Resulta que quedamos mal ante el mundo porque Cristina F de K admitió en público que teme irse porque el vice le da vuelta el país. ¿El mamarracho no es que el vicepresidente haga oposición contra el gobierno? ¿Cuál es el mérito de Cobos para ser un referente, haberse opuesto a las retenciones al campo? Lo correcto hubiera sido que diera un paso al costado, que una vez puestas de manifiesto sus diferencias con la Presidenta renunciara y se dedicara a construir su propio espacio político. Pero no, en vez de eso los medios, los dirigentes rurales y algún que otro político que busca acomodarse en una posible alianza, lo convirtieron en alguien cuyas opiniones deben ser tenidas en cuenta. Parece que nadie nota que es él quien atenta contra la gobernabilidad y que colabora con la destrucción de las ya vapuleadas instituciones. Además ahora parece que la relación con China es primordial y los medios hablan de desaire, pero seguramente si el viaje se hubiera hecho hubieran llovido criticas por viajar en medio de una crisis.
En este año se empezarán a acomodar los muñecos que quieren ser candidatos a algo en el 2011 y cualquier error del oponente es de gran utilidad, así como también que no trasciendan los propios. Entonces Mauricio, por ejemplo, aprovecha el lío de los Kirchner para que no se note su veto a leyes a favor de los Derechos Humanos o que pasen de largo las escuchas y el papelón de la policía porteña. Tenemos una amplio abánico de candidatos para elegir, si hasta un colombiano quiere ser presidente de Argentina. Es que este país es muy tentador se ve. Quedan unos cuantos rounds, así que no tiremos la toalla y sigamos resistiendo.

1 comentario:

  1. Totalmente de acuerdo con tu opinión. Pero tu forma de expresarla me gusta más.

    Nat

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